*Por: Octavio Aristeo López
Sentencia nuestra constitución en el “Artículo 1o. En los Estados Unidos Mexicanos todas las personas gozarán de los derechos humanos reconocidos en esta Constitución y en los tratados internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte, así como de las garantías para su protección, cuyo ejercicio no podrá restringirse ni suspenderse, salvo en los casos y bajo las condiciones que esta Constitución establece. Las normas relativas a los derechos humanos se interpretarán de conformidad con esta Constitución y con los tratados internacionales de la materia favoreciendo en todo tiempo a las personas la protección más amplia. Todas las autoridades, en el ámbito de sus competencias, tienen la obligación de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos de conformidad con los principios de universalidad, interdependencia, indivisibilidad y progresividad. En consecuencia, el Estado deberá prevenir, investigar, sancionar y reparar las violaciones a los derechos humanos, en los términos que establezca la ley”.
Fotografía: Tiyako Felipe
Y en el “Artículo 128. Todo funcionario público, sin excepción alguna, antes de tomar posesión de su encargo, prestará la protesta de guardar la Constitución y las leyes que de ella emanen.”
Toda autoridad, todo funcionario público, todo servidor público “tiene la obligación de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos”. Este es el problema. Si observamos, que estos desviados mentales no tiene tiempo para comer, para dormir; está en constante revisión médica y psiquiátrica; intensifica el consumo de pastillas, alcohol, cigarrillos o puros, para relajarse, a veces se da el gusto de golpear a sus contrincantes, mancillar los símbolos patrios, ser irrespetuoso de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, violar los derechos humanos. Es su capacidad de elección racional del político, al sentirse impune e intocable, son un peligro social, por ello, son premiados.
Convierten la política en un asunto privado, en el que el político desarrolla habilidades para hacer negocios en el área de la política; entonces, la política se convierte en un mercado político, no en un servicio social y comunitario; el esfuerzo y sacrificio del político es con el fin de ganar dinero, no servir a los ciudadanos, para hacer frente a los gastos extraordinarios que acarrea la carrera política.
En éste espacio desde el 8 de septiembre de este año, he sostenido y sostengo el respeto a la constitución por parte de la clase política, que después será gobernante; que democratizar la organización interna de los partidos políticos ante la excesiva corrupción y sus alianzas en los tres niveles de gobierno, es casi imposible; que es imposible, dentro de lo posible alcanzar los tres objetivos de las reformas: elevar la productividad del país, fortalecer y ampliar los derechos de los mexicanos, y afianzar el régimen democrático y de libertades.
Fotografía: Tiyako Felipe.
Corregir los abusos de los servidores públicos es una ilusión, un sueño que desean los mexicanos durante décadas; cuestionar la mucha administración y poca política que tanto daña al mexicano de escasos recursos en un gobierno oligárquico, lleno de privilegios, son prácticas políticas antiguas; esperemos, que los cambios radicales estén acompañados por políticos con talento de estadistas, y que siga los resultados democráticos.
Cuando la clase política no respeta la constitución es vivir el pasado, pero ahora el pasado se repite más sanguinario, mas recargado de maldad, el querer reproducir nuevas formas de dominación de ciertas personas asesinos que están en el gobierno, para ello, no necesitan estudios de preparatoria ni universitarios, solo compran falsificación de títulos; para asesinar no se necesita estudiar. Por consiguiente, utilizan el marketing político que solo cumple: endurecer prácticas antidemocráticas; fomentar el clientelismo político y convertir la política en un espectáculo; incrementando la esquizofrenia social e inducir el comportamiento político del ciudadano.
La historia de la humanidad pone varios ejemplos de que los ignorantes, ávidos e inquietos, son capaces de cualquier cosa, de cometer actos de barbarie, como la tortura y asesinato para triunfar en política y tener poder; estos asesinos tiene la habilidad desarrollada para engañar y mentir con una vida opaca quieren sobresalir a toda costa; dan excelentes regalos, tocan bien la flauta, bailan bien en las mesas, son excelentes bufones, ese es su mérito para conseguir favores.
Los asesinos llegaron a la clase política con antecedentes de asesinatos anteriores, después cuando son gobernantes siguen con sus asesinatos en serie o si después, se vuelven opositores al gobierno, tejen un manto de impunidad ayudados por sus intelectuales orgánicos que crean una imagen de víctimas; ahí siguen, utilizan el poder para vivir en la impunidad, participan en la política para cubrirse de impunidad; así están en los diferentes partidos políticos para protegerse mutuamente, engañando al pueblo; son opositores al gobierno pero tiene familiares e incondicionales en el gobierno.
Cuando se sienten amenazados de sus crímenes inmediatamente recurren al músculo social de seres humanos sometidos y domesticados, para seguir viviendo en la impunidad, se creen inmunes, llego la hora del cambio.
El gobierno mexicano vive en un contexto global, sus decisiones son observadas; qué rostro, qué cara pondrá para sustentar sus discursos y sus acuerdos si están llenos de sangre inocente ¿Tendrá la confianza internacional?; no puede ocultar los hechos sangrientos de la clase gobernante asesina de sus ciudadanos y estudiantes, incluso, ya está comprobada la participación de miembros del Ejercito Mexicano en la muerte de ciudadanos el municipio de Tlatlaya, Estado de México, en la cual el gobernador trató de ocultar los hechos con el propósito de ser beneficiado por este sector para en un futuro ser presidenciable.
Igual el gobernador, ahora ex gobernador, sabía del asesinato de estudiantes y ciudadanos, omitió respetar la constitución, sabía que el presidente de Iguala estaba involucrado y no lo detiene, igual líderes nacionales del PRD.
Son seres humanos perversos y son un peligro para las libertades y el respeto a los derechos humanos; más si tienen poder o son gobernantes, utilizan fuerzas policiacas para matar a sus gobernados, a pesar de que juraron cumplir con la Constitución democrática que protege los derechos humanos de los ciudadanos. Ya lo están demostraron en varias entidades.
Fotografía: Mónica Olivares.
Existe división del trabajo en la clase gobernante, existen jerarquías; un desplazamiento del poder central son sus oficinas centrales en cada entidad federativa; cada uno de los organismos centralizados, son las 18 secretarías de estado que son dependencias administrativas que auxilian al presidente de México en sus funciones, entre ellos está la secretaria de Gobernación, la secretaria de la Defensa Nacional, la secretaria de Marina, la Procuraduría General de la República, y el titular del Centro de Investigación y Seguridad Nacional, tienen actividad en los 2440 presidencias municipales; además cada diputado federal, son 500, saben de las actividades de cada municipio que les corresponde su distrito (político, económico, social, cultural), igual los 138 senadores de la República en cada una de las 31 entidades y el Distrito Federal.
Todos los integrantes del Poder Judicial tienen información, que comparten al centro, están en constante relación los tres poderes que conforman el gobierno, la clase gobernante, porque conforman el sistema político; además, la clase política, entre ellos, son los dirigentes y líderes de los partidos políticos, saben quiénes conformaran la clase política gobernante porque es a través de los partidos políticos que salen los candidatos que avala el INE. Estas oficinas del poder central en las entidades, sin duda, que informaban al poder central; si la información no llegaba al Jefe del Poder Ejecutivo, y se entera por las noticias; además, su reacción es tardía (cuatro días después) se comprueba que existe traición por parte de sus colaboradores más cercanos, para dañar su imagen, y tienen responsabilidad civil y penal por no cumplir con la constitución.
Si es el caso de que el Jefe del Poder Ejecutivo, este enterado y no actúa por miedo o temor; está sometido y dominado por fuerzas políticas ambiciosas y asesinas, con toda razón de Estado debe ejercer sus facultades constitucionales, porque es el pueblo, la Nación, lo está demandando con las movilizaciones de repudio a los gobernantes asesinos en México. Es su oportunidad histórica.
“Artículo 87. El Presidente, al tomar posesión de su cargo, prestará ante el Congreso de la Unión o ante la Comisión Permanente, en los recesos de aquél, la siguiente protesta: “Protesto guardar y hacer guardar la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y las leyes que de ella emanen, y desempeñar leal y patrióticamente el cargo de Presidente de la República que el pueblo me ha conferido, mirando en todo por el bien y prosperidad de la Unión; y si así no lo hiciere que la Nación me lo demande.”
El sistema político mexicano moderno está inmerso en la globalidad, unificado y unificarte; es un subsistema yuxtapuesto ordenado, así las entidades de la República mexicana son un conjunto de subsistema yuxtapuesto ordenado del poder central; entonces, lo que sucede en las entidades son reflejo del poder central, nacional y global. Están relacionados. Llegó la hora del cambio constitucional, hacer cumplir la constitución en contra de los gobernantes asesinos.
*Octavio Aristeo López es profesor de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, Universidad Nacional Autónoma de México.
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