Por: Tiyako Felipe.
El pasado 5 de febrero, en el marco del 99 aniversario de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, los promotores de la Constituyente Ciudadana Popular (CCP) presentaron en el Monumento a la Revolución su propuesta de Fundamentos Ético-Políticos para una nueva Constitución que busca “Refundar el Estado y la Nación desde las comunidades y el pueblo”.
Los fundamentos presentados parten de la existencia de una “tragedia nacional” ocasionada por un proyecto de neocolonización disfrazada de combate a la delincuencia, reformas estructurales y tratados de libre comercio, de la cual dio cuenta el Capítulo México del Tribual Permanente de los Pueblos (TPP) que sesionó entre los años 2011 y 2014. La conclusión del citado tribunal fue contundente: “no existe otro país en el mundo que sin vivir en una situación de guerra declarada haya sido tan destruido como México”. Por lo tanto, urgió la refundación del Estado y la Nación sobre nuevas bases ético-políticas y económicas.
Con el fin de avanzar en lo que llaman el proceso de Refundación Nacional los integrantes la Constituyente Ciudadana y Popular hicieron públicos los fundamentos que beberían regir la nueva constitución. Entre ellos destacan los siguientes: el principio del “buen vivir”, respeto a la madre tierra; el constituyente es un proceso descolonizador para la recuperación de las fuerzas productivas; el Estado debe ser una “Comunidad-Estado”, plurinacional, pluricultural basado en la democracia comunitaria y se regirá por el principio de “mandar obedeciendo”; será realmente igualitaria y enfrentará los problemas de discriminación; la nueva constitución busca alcanzar una sociedad justa, humana, equitativa, solidaria y feliz.
Durante su intervención el obispo Raúl Vera López, señaló que todos queremos un nuevo México con paz, progreso y respeto para nuestros pueblos y nuestra persona. Las beses éticas presentadas hoy son el inicio de la construcción de un nuevo pacto social y con ellas se madura a un “nuevo sujeto político”, es decir, un pueblo con “conciencia política” que ejerce una “democracia participativa”. Vera López enfatizó en que los partidos políticos “no son la opción en este momento”, la nueva constitución debe ser construida por consenso en el pueblo, en los barrios, las comunidades y las cañadas. Finalmente hizo un llamado a seguir multiplicando los “facilitadores” en todo el país porque en este largo proceso lo que se requiere es un pueblo caminando.
Por su parte, el poeta Javier Cicilia saludó la iniciativa de la nueva Constituyente Ciudadana y Popular, y mencionó que en el estado de Morelos, se está haciendo un esfuerzo similar para devolver a la gente su palabra a través de la exigencia de la puesta en práctica de la Ley de Participación Ciudadana, cuya esencia contempla la consulta a la población. A través de dicha ley consultarán la revocación del mandato al gobernador Graco Ramírez y el desarrollo de los megaproyectos, ejemplificó.