Por Sergio Miranda
Derivado del rotundo fracaso de la reforma energética, el reciente incremento en el precio de las gasolinas y diésel en un 20%, es sin duda un duro golpe a la economía de todos nosotros, el pueblo de México. El malestar por esta medida no se hizo esperar en todo el país, generando manifestaciones y bloqueos a carreteras.
En el municipio de Ixmiquilpan, Hidalgo, un numeroso grupo de ciudadanos agraviados por estas alzas al precio de los combustibles, decidió manifestarse saliendo a las calles de manera pacífica, realizando actos simbólicos y principalmente evitando el saqueo y la rapiña a tiendas comerciales y locales, por parte de personas infiltradas por operadores del PRI. Después de 4 días de manifestaciones pacíficas y bloqueos en la carretera México-Laredo, en los límites de los barrios del Fitzhi y de Dios Padre, al gobernador del estado Omar Fayad Meneses, que lo han de recordar ya que cuando fue senador propuso una ridícula iniciativa de ley, con fines de censurar y criminalizar el uso de internet, también promovió y voto a favor de la ley energética, no le agrado la idea de que los ixmiquilpenses tomaran la carretera, así decidió mandar limpiar la vía de estos manifestantes, para tal efecto mando un contingente de policías estatales y federales, estos últimos portaban armas de grueso calibre, sumando entre las dos corporaciones poco más de 500 oficiales.
Acto seguido, el secretario de seguridad del estado de Hidalgo, quien encabezó la operación, se dirigió a los manifestantes, los cuales querían un diálogo, en el ánimo de llegar a un acuerdo, haciéndole saber que de manera pacífica ellos se mantendrían allí, incluso algunos manifestantes les llevaron agua a los policías para mitigarles la sed causada por el siempre penetrante calor del Valle del Mezquital.
El secretario de seguridad les dijo que no venía en carácter de negociar y la orden era abrir el camino a como diera lugar, que les daba 10 minutos para abandonar la carretera, el bloque de manifestantes se agrupo, entonaron el Himno Nacional Mexicano y decidieron avanzar de manera pacífica, ambas corporaciones al ver este acto decidieron encararlos y deshacer de manera violenta el contingente, cuando de pronto por la retaguardia hizo acto de presencia otro grupo más de manifestantes, conformadas por varias comunidades del sur del municipio de Ixmiquilpan, reconocidas estas por su valor y aguerridos que son, de manera pacífica y también entonado el Himno Nacional Mexicano decidieron avanzar en dirección a los oficiales, estos al verse superados en número decidieron atacarlos con sus armas, desencadenando así el enojo de todos los manifestantes que ya para ese momento sumaban casi tres mil personas. La refriega duro un aproximado de 45 minutos, posteriormente y ya compactados en un sólo bloque los manifestantes hicieron huir a los policías.
El conflicto tuvo como resultado poco más de veinte civiles lesionados, cuatro de ellos por impacto de bala, dos muertos: Alan Gutierrez y Fredy García Maldonado, igual por herida de bala y cuatro vehículos quemados. No cabe duda que Ixmiquilpan, y los demás municipios que componen una gran parte del Valle del Mezquital pasan a ser referencia importante en cuanto a resistencia contra las políticas pusilánimes y carroñeras del gobierno federal.