Por: Ernesto Funesto Mondragón La primavera del 2006 se tiñó de rojo. De un rojo violento, rojo de sangre; pero también rojo combativo. Era el mes de mayo y México era un hervidero político. Recién había sucedido el crimen empresarial de la mina Pasta de Conchos, donde debido a la negligencia de Grupo México –perteneciente…