Por: Mónica Olivares.
Ciudad de México, 8 de septiembre, 2016. El medio de comunicación Radio Zapote, –emisora localizada en las instalaciones de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH), lugar donde hace 15 años se albergó a la comandancia zapatista durante su visita a la capital– denunció el día de hoy en las inmediaciones del Centro Nacional de Comunicación Social (CENCOS), la incautación de su equipo de transmisión.
El pasado jueves 18 de agosto, personas identificadas por el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), “acudieron al sitio donde se encontraba el equipo transmisor –fuera de las instalaciones de la ENAH– en el lugar entregaron un documento con fecha de 17 de agosto de 2016, donde señalaba que, los inspectores estaban comisionados para verificar lo relacionado con equipos de radiodifusión que transmiten en la frecuencia 102.1 MHz”.
El lugar donde se encontraba las herramientas de trabajo era desconocido, fuera del lugar donde se realizan las actividades del medio y el equipo sustraído fue un transmisor de frecuencia modulada de baja potencia, una antena de polarización circular y una línea de transmisión (cable coaxial RG8), el cual obtuvieron a través de intimidar a la persona que recibió a los funcionarios “lo amenazaron con quitarle su casa si no le permitía el ingreso”.
Los integrantes de la radiodifusora mencionaron que desde hace tres meses no transmitían por la Frecuencia Modulada (FM), lo que significa que, al momento de la inspección por el IFT, el equipo se encontraba apagado. Asimismo, no dejaron acta sobre el aseguramiento del material o documentación donde conste que el transmisor se encontraba apagado.
A través del comunicado leído por los integrantes, expusieron que esta agresión se suma a una serie de acciones de hostigamiento a su labor informativa y periodística por parte de la dirección de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH) y otros actores que han vulnerado su libertad de expresión.
Julio Colín de Article 19 México y Centroamérica comentó que a han acompañado a Radio Zapote a partir de la conformación de la red Rompe el Miedo (RRM), iniciativa que surge en el 2013 para denunciar y señalar la violencia policial durante las protestas posteriores a la llegada de Enrique Peña Nieto a la presidencia. “Nos queda claro que en el caso de Radio Zapote, en la requisa del equipo, hay un indicio de violencia institucional, nosotros la ubicamos como el uso de mecanismos judiciales o administrativos por autoridades, personas con protección pública, con poder económico o influencia política para obstaculizar o anular la labor periodística de un medio. Esta violencia institucional tiene expresiones como la judicialización, la criminalización, el acoso administrativo y retiro de pautas de publicidad oficial. En ese sentido, esto no deja de ser violencia, un atropello al ejercicio del medio”.
Articulo 19 ha registrado 7 casos de violencia institucional en este primer semestre del año contra medios de comunicación, esto es: 4 agresiones a los medios digitales junto con los radiofónicos, 3 agresiones a los medios impresos y 4 casos a periodistas.
Por su parte Irina Vázquez de la Asociación Mundial de Radios Comunitarias México (AMARC), reconoció el trabajo que ha desarrollado Radio Zapote desde hace varios años, “lo que nosotros desde AMARC señalamos es la no criminalización de las y los comunicadores comunitarios en cualquier tipo de espacios”.
Enfatizó la importancia y el papel de las radios comunitarias, “sabemos que el contexto en el que viven las radios comunitarias en el país ha transitado por varios cambios, a partir de la reforma constitucional en el 2013 se abren nuevos capítulos en el que se reconocen jurídicamente las figuras de las radios comunitarias. Sin embargo, la historia no siempre fue así, el reconocimiento jurídico es un precedente en la historia de los medios de acuerdo a la necesidad de comunicar de los diferentes procesos históricos”.
Irina mencionó que la mayoría de las radios comunitarias no cuentan con la documentación o la concesión por parte de IFT, “lo que se sabe es que en este contexto de criminalización a periodistas, al no contar con estos permisos vulneran y aumenta la escala de violencia hacia los colectivos y no son considerados comunicadores ni periodistas”. Se conoce que en la Ciudad de México, dos radios comunitarias están pasando por procesos similares de acoso y hostigamiento las cuales son Radio Ajusco y Radio Zapote.
Ángel Huerta mencionó dos radios que desde hace un año han sido atacados por diversos actores, “la radio KeHuelga desde hace un año tienen una interferencia en su señal lo que que generado que no puedan transmitir y debemos recordar el desalojo violento de Regeneración Radio en las instalaciones del CCH Vallejo, estos casos son parte de los antecedentes de agresiones a medios no formalizados o legalizados”.
Por su parte Irina concluyó emitiendo un llamado al IFT para “dejar de secuestrar los equipos y en cambio sí construir canales de comunicación y diálogo a favor de fortalecer la libertad de expresión y el derecho a la información en la Ciudad de México”.