Adolfo Tovar / Políticas media.
Como si hiciese falta enrarecer aún más el contexto social actual, el pasado sábado 27 de septiembre, en las inmediaciones de Iguala en el Estado de Guerrero, se ha cometido un acto innombrable, ningún pretexto puede ser antepuesto a lo que ha ocurrido esa noche; ni bien hemos pasado el trago amargo de las noticias de Tlatlaya, Estado de México y nos llega la devastadora noticia de un cobarde y artero crimen político más, dirigido, no sólo contra el grupo de estudiantes normalistas de Ayotzinapa, sino contra la sociedad en su conjunto y dejando ver claramente las intenciones de los tres niveles de gobierno hacia los grupos disidentes de ahora en adelante.
Hoy, conocer a las y los culpables es lo de menos, lo más importante es el mensaje político que se ha mandado desde las altas esferas de la aristocracia “protoburguesa” que gobierna el país (con absoluta ilegitimidad), con la complicidad de una “izquierda” partidista, mansa y agachona que no deja de clamar “justicia” ante las “instituciones”, que son las mismas que le han hecho fraudes electorales hasta el cansancio, las mismas que han corrompido a sus bases, las mismas que han destrozado México más de una ocasión.
¿Dónde está la justicia?, la justicia hoy en día se encuentra muy dentro de la memoria colectiva de las y los mexicanos, está dormida en el rincón más obscuro de la mente de quienes aún vivimos esperando su regreso. Las opciones se agotan y los gobernantes creen que el pueblo es el borrego manso que seguirá dejándose manosear por su fétido tacto. Sin embargo no es así y hay innumerables ejemplos del despertar de las y los mexicanos que ya se encuentran en proceso de organización, que no claudicaremos hasta llegar a las últimas consecuencias y desterraremos de tajo todos estos tumores que se han enquistado en nuestra sociedad.
Por el momento aquí comparto con ustedes los testimonios de compañeras y compañeros de la FECSM, quiénes están en brigadas para recaudar víveres y recursos económicos para las familias de las y los muertos, desaparecidos y heridos en el Estado de Guerrero. El centro de acopio en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM: “Colectivo Conciencia y Libertad”, Edificio “B”, planta baja de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales en Ciudad Universitaria.
Entrevista realizada a normalistas de Ayotzinapa en la FCPyS, 29 de septiembre de 2014: