Se llevó a cabo la séptima edición del “Congreso Nacional de personas con talla baja” del 16 al 19 de noviembre en la ciudad de Querétaro, con la participación aproximada de 180 asistentes, provenientes de 14 Estados de la República Mexicana. En donde se realizaron diversas actividades enfocadas a la población y el fortalecimiento del trabajo organizado por la inclusión social.
El evento pudo congregar a personas con dicha condición de la Ciudad de México, Durango, Estado de México, Guanajuato, Guerrero, Jalisco, Michoacán, Nayarit, Nuevo León, Puebla, Querétaro, San Luis Potosí, Sinaloa y Veracruz. Además de contar con la representante de Little People of America, Olga Marohnic, quien trabajó durante 13 años por la comunidad latina en Estados Unidos.
Entre las actividades realizadas en los 4 días del evento destacan: el “Encendido de los arcos en color verde del Acueducto” por el Día Internacional de las personas con talla baja, el “Informe Anual del Consejo Nacional de Gente Pequeña de México”, el “Encuentro Deportivo Talla Baja 2018”, el “Certamen de belleza y talento en grande”; así como diversos talleres de formación, citas médicas para personas con talla baja y un panel médico con especialistas que abordaron el tema.
Cabe señalar que este año se dio un enfoque prioritario al deporte adaptado, ante el problema de sobrepeso y obesidad que enfrenta gran parte de la población de talla baja. Asimismo, por primera vez se iluminaron los arcos del Acueducto de la Ciudad de Querétaro, proyecto por el cual se había trabajado desde hace 3 años, según menciona Laura Alma Casados, Presidenta de Unidos por un Mundo Incluyente A.C., quien formó parte del comité organizador del evento.
El objetivo de iluminar el monumento histórico -señala Laura- era “visibilizar a las personas de talla baja aquí en el Estado, el decir que tenemos necesidades y derechos. Que se den cuenta de que la lucha es grande y que somos muchos a nivel nacional.” Por ello, el Congreso pudo mostrar a las autoridades que: “somos muchas personas que luchamos por otras, por las generaciones que vienen y que si en un Estado logramos algo, se replica en otros; y qué mejor que seamos un punto de lanza”.
El movimiento de personas con talla baja en México
En abril del presente año, Martha Elena Santos Arroyo del Estado de Sinaloa, obtuvo la presidencia del Consejo Nacional de Gente Pequeña de México y al comenzar con su cargo se ha enfrentado a diversas dificultades, la principal, que México es un país territorialmente grande y por ello, no es fácil tener un acercamiento con cada entidad federativa; sin embargo es importante hacer presencia para fortalecer a los grupos organizados y al propio movimiento de talla baja y su estructura.
Para ella, el cambiar a la Mesa Directiva del Consejo Nacional por medio de una práctica democrática es “la vida de una organización”, porque requiere de movimiento. “Algo que debemos enseñar es que no es un desplazamiento -de unas personas por otras- sino, un mecanismo para dar nuevos bríos al movimiento, nuevas ideas y para no generar monopolio”.
Por otra parte, comenta que la población de personas con talla baja es muy heterogénea, por lo que sus demandas son diversas y van acorde a cada etapa de la vida, pues se pide desde: inclusión educativa, ajustes razonables, espacios de participación para jóvenes, mayor apertura laboral y sueldos dignos. Asimismo, “los que tenemos más edad, nos preocupa la atención de las personas adultas mayores con talla baja, porque vemos que no hay política pública para quienes tienen 50 o 60 años”.
El Congreso Nacional de personas con talla baja de este año, fue el primero para ella en calidad de presidenta, y considera que dicho espacio es el más representativo a nivel nacional, porque es la culminación del trabajo del Consejo Nacional de Gente Pequeña, ahí se puede ver el trabajo de cada Estado. Además de ser un termómetro “para darnos cuenta de lo que piensa la gente de nosotros, de los diferentes Estados y de lo que podemos hacer, porque nos dan una línea de lo que podemos trabajar. El escuchar a la gente de forma directa te fortalece o te hace cambiar la línea de lo que creías que debías trabajar. El congreso es definitivamente una gran oportunidad para mejorar el trabajo”.
En retrospectiva y los avances para la población de talla baja
Margarita Castañeda Martínez del Estado de Jalisco, precursora del movimiento de gente pequeña en México, comenta que los congresos “representan un sueño hecho realidad” pues son: “la realización plena de un objetivo que sólo busca la convivencia, armonía, hermandad, fraternidad y el bienestar común de todas las personas con talla baja. Es estrechar vínculos de amistad en todos los aspectos”.
Para ella, este año se logró: la participación directa de otro país (Estados Unidos), se aumentó el número de miembros nuevos y se motivó a incrementarlos el siguiente año, se pudo crear consciencia en la ciudad de Querétaro y con ello, “dejamos de ser invisibles”.
Pero ¿qué ha cambiado en la sociedad, durante todos estos años de lucha del colectivo de personas con talla baja? Margarita Castañeda menciona que principalmente “se está abriendo una nueva historia de la cultural de la discapacidad”. En cuanto al camino de reconocimiento de la comunidad, el primer logro fue estar en el ámbito del derecho a la igualdad y no discriminación para su inclusión social; luego establecer el 25 de octubre como Día Mundial de las personas con talla baja, en donde se ha logrado el Día Nacional de las personas con Talla Pequeña en México y varios Estados han aprobado Días Estatales y Municipales de Talla Baja. Asimismo, recientemente se ha reformado la Ley General para la Inclusión de las personas con discapacidad, en donde se integra el término de “trastorno de talla” para garantizar sus derechos humanos.
Congreso Nacional de personas con talla baja 2019 en Nayarit
El siguiente Congreso Nacional de personas con talla baja 2019 se realizará en el Estado de Nayarit, con la organización “La Gente Pequeña de Nayarit” y una convivencia previa en Guerrero a cargo de las “Personas de Talla Baja Guerrero”. Ambas comenzarán con la organización de dichos eventos apoyadas del Consejo Nacional de Gente Pequeña de México.
Finalmente Laura Casados representante del Estado de Querétaro, expresa que: “El ser una persona de talla baja para mi ha sido una bendición en mi vida, ha sido una oportunidad de enfrentarme a retos y darme cuenta de que soy capaz de hacer eso y mucho más. El tener una condición diferente, no pasa nada, simplemente es una oportunidad de aprender nuevas cosas”.
“Sigamos trabajando con el mismo fin de lograr el desarrollo social en todos los ámbitos, sin olvidarnos que, el servir a los demás trae más satisfacciones a nuestras vidas con humildad . Pues deseo que las nuevas generaciones encuentren un mundo mejor en todos los aspectos. Una persona de talla baja puede realizar sus sueños y hacer una vida digna. El día de hoy cierro un ciclo en mi trabajo muy importante y comenzaré mi jubilación, un logro más. Eso quiere decir que, sí se puede”. Comparte Margarita Castañeda, muy emocionada por esta nueva etapa en su vida.
Martha Elena Santos expresa que las personas con talla baja: “debemos de ser proactivas, debemos de ser agentes de cambio, que podamos ver en qué podemos participar y transformar. Nuestro grupo minoritario requiere de esos agentes de cambio. Requerimos de estar todos unidos trabajando, el hecho de que seamos diferentes es lo que le da la verdadera riqueza a un país y lo hace grande”. En cuanto a las autoridades “trabajemos de forma conjunta y hagamos equipo”.
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